Recorrer Riga al volante de un PanCar es vivir la ciudad desde una perspectiva distinta: elegante, libre y llena de personalidad.
En esta experiencia exclusiva, los visitantes se ponen al mando de un vehículo de diseño retro y único, inspirado en los automóviles clásicos del siglo pasado, para explorar el encanto de la capital letona con un aire de aventura y distinción.

El recorrido atraviesa el centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con sus fachadas art nouveau, plazas empedradas y cafés centenarios.
Cada curva revela una nueva postal: el majestuoso río Daugava, los mercados tradicionales, las cúpulas doradas de las iglesias y los secretos que esconde la ciudad más cosmopolita del Báltico.
El PanCar, silencioso y sostenible, combina diseño, nostalgia y modernidad, ofreciendo una forma cómoda y divertida de descubrir Riga sin perder su autenticidad. Es una invitación a sentir el pulso de la ciudad, a ritmo propio, con el viento en el rostro y el alma ligera.